jueves, 3 de diciembre de 2009

La vecina

Las vecinas son siempre un mundo de oportunidades nunca bien ponderado. Se trata de observar y esperar. Siempre puedes sacar algo. Ayer y hoy he subido en el ascensor con dos vecinas en situaciones completamente distintas. Una de ellas, una maciza grande. Parece un armario, aunque atractiva. Y la otra una mujer más normal por tamaño y apariencia. Una casada con una hija, mientra, la otra, soltera viviendo con una amiga. No necesariamente, pero, todo apunta a lesbiana.


La cuestión es que, a veces, subes con alguien en un ascensor y no hablas nada. No es mi caso, me gusta hablar, preguntar y comentar. Ya vendrán las oportunidades. Bueno, lo malo es el "vecindario", pero, es malo y bueno para los dos "actores". No voy a negar que me gusta mirar las braguitas de las vecinas. !!Qué variedad!! Un mundo de posibilidades!! pero también mirar por la ventana. Algunas veces te ves a la vecinita desnuda o en paños menores. O también el consolador en el tendedero. Bueno posibilidades.


Aprovecho para decir que los ascensores son para mí una fantasía, un lugar en el que además de achuchar y meter mano, me gustaría pegar un buen polvo o que me la chupen. ¿por qué no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario